Mi Historia en una Casa Ecuatoriana

DESCRIBE

Mi historia empezó en el principio del semestre. El ocho de género, llegué en un país diferente, con el propósito de crecer, aprender, amar, y servir. El ocho de género, empezó a vivir con una familia nueva, en una cultura diferente, con amigos, comidas, a experiencias diferentes. Estaba nervioso. ¿Cómo sería mi experiencia? ¿Cómo pasaría si no me gusta la familia? ¿Cometí un error al elegir vivir con una familia ecuatoriana todo el tiempo? Tenía un montón de preguntas, pero también, tenía fe. Había visto a Dios moverse en el pasado. Había visto Dios proveer exactamente lo que necesitaba una y otra vez. Tenía fe que Dios sería el mismo en ecuador. Llegué en Ecuador con una oración, “Dios, úsame en este lugar, para amar a otros, con tu amor, para servir otras como me has servido, y para compartir tu evangelio.” Dos meses después, estoy aquí, viviendo en este casa con esta familia. Sin embargo, mucho ha cambiado. Ahora, esta familia, es mi familia. Los estudiantes que conocí el primer día, ahora, son mis amigos cercanos. Las comidas nuevas que he probado cada día, ahora, son algunas de mis comidas favoritas. Las diferencias culturales, ahora, son parte de mi cultura. Finalmente, este país, un país nuevo, ahora, se siente como mi hogar. En dos meses, todo he cambiado. 

Después de decir este, quiero compartir, examinar y aprender de una experiencia que he tenido durante mi tiempo en este hogar. Durante los dos meses, he tenido muchas experiencias. He aprendido a vivir en una nueva cultura con costumbres muy diferentes a la mía. He conocido un montón de personas, miembros de la familia, conductores de Uber, y mi equipo de mi pasantía. He tenido la oportunidad de compartir el evangelio en muchas situaciones y lugares. Sin embargo, la experiencia más increíble fue cuando tuve la oportunidad de dar una charla en el colegio de mi hermano. La historia fue como así. Desperté el mañana del 14 de marzo y estaba tan enfermo. Fue difícil para hablar, tuve mucho sueño y me sentí horrible. Sin embargo, mi mamá y yo fuimos al colegio y entramos la clase de mi hermano Samuel. Con la fuerza de Dios, delante de la principal del colegio, el profe, mi mamá, y veinte estudiantes, presenté el evangelio, una canción que habla sobre el evangelio, el principio de mi testimonio, una historia de la Biblia, y el resto del mi testimonio. Voy a incluir lo parte más importante de mi charla. 

“El evangelio es un milagro. Dios envió a su hijo, para traer el reino de Dios a este  mundo, para morir por nuestros pecados, tomando la vergüenza de nuestros pecados, para resucitar, venciendo el pecado y la muerte, para que nosotros pudiéramos estar libre del ser esclavos de pecado, y empezar una vida nueva, viviendo en relación con Dios, nuestro padre, viviendo en la luz, y tener el honor de ser hijos de Dios.” 

“No terminé mi historia. La vida de ser cristiana no es fácil. No crean esta mentira. Pero vale la pena. Vivir en relación con Dios tiene más valor de todo el mundo tiene para ofrecerles. Para terminar mi historia, cuando estaba en los últimos años del colegio, escogí a seguir a Dios con toda mi corazón, alma, mente y fuerza y todo he cambiado. No estaba viviendo antes de seguir a Cristo. Después que encontré el amor verdadero del Padre, me di cuenta qué, antes de él, estaba muerto. No podía amar. No podía tener paz. No podía tener amigos verdaderos. Pero, después, estoy vivo. Tengo relación con el creador perfecto de los cielos y la tierra. He tenido una paz que no podía entender durante los tiempos más difíciles de mi vida. Tengo una alegría y gozo que nunca me abandona. No es todo rizas y sonrisas, es mucho más, es el conocimiento que Dios está conmigo y nunca me fallara. Finalmente, tengo amigos reales. Más de esto, tengo familia. Amo mis hermanos y hermanas en la familia de Cristo más de lo que yo pensaba que era posible. Soy amado. Soy vivo. Soy un hijo de Dios. Y eso, nunca va a cambiar. Y la misma oportunidad está abierto a ustedes.” 

INTERPRET

Cuando mis padres me dijeron, “Willy, queremos que presentes una charle sobre el evangelio y el proceso de decir no a tiempo en el colegio de Samuel,” me sentí horrible. Cuando les pregunté cuánto tiempo tendría para hablar, me respondieron que tendría una hora o una hora y media.  En un momento, mi celebro se llenó de preguntas y acusaciones. ¿Por qué yo? ¿Ellos no tienen un pastor o profe que pueda hablar con ellos? ¿Este es mi idioma segunda, como podría hablar por una hora? ¿Por qué quieren yo, solo es porque tengo una educación y soy blanco? ¿Cómo puedo entrar a una escuela en Ecuador y tener la expectativa de que me respetarán? Aunque mi celebro estaba lleno con preguntas, estaba vacío con respuestas a mis preguntas. Por las próximas semanas, estaba desagradecido. No quería hablar. Me sentía que esta oportunidad solo sería más tarea para hacer. 

Sin embargo, en las últimas semanas antes del día, Dios cambió mi corazón. Me di cuenta muchas verdades. Primero, tengo una oportunidad de compartir el evangelio y mi testimonio con un grupo de jóvenes en Ecuador. Qué bendición. Este es una gran oportunidad de practicar español y predicar. Segundo, me di cuenta de que solo soy un mensajero y Dios tiene el papel de cambiar corazones. Finalmente, empecé a orar para los estudiantes. En este proceso, el proceso de orar y preparar la charla, Dios me creció un amor para los estudiantes. Empecé a recordar mi testimonia de fe y mi tiempo en el colegio. En este proceso, Dios me llenó con paz, gozo y un amor que no podía explicar aparte de él. 

Cuando yo fui el colegio el 14 de marzo, aunque estaba enfermo y mi cuerpo se sentía horrible, entré el cuarto lleno con gozo, amor, y paz. El momento que empecé a compartir la palabra con los estudiantes, mi cuerpo se sentía mucho mejor, podía hablar, y me sentí una paz que no podía explicar. Para la próxima hora, compartí sobre mi hermoso Dios con más pasión y amor del que he experimentado en mi vida. Cuando terminé, otra vez mi cuerpo se sentía horrible. Sin embargo, me sentí la paz del Señor. Estaba muy agradecida por mis padres que hicieron tanto para que esta posibilidad sucediera. 

EVALUATE

Antes, durante y después de este evento, aprendí muchas cosas. Primero, en los últimos semanas antes del día, aprendí como estar agradecido por las bendiciones que no se sienten como bendiciones. Me creí un corazón agradecido para mi familia aquí, mis hermanos, y la cultura de Ecuador. 

Segundo, aprendí que, a veces, las razones de personas no son razones culturales. En el principio, me pregunté a mis padres en mi cabeza, “¿Por qué quieren yo, solo es porque tengo una educación y soy blanco?” Ahora, yo sé que esta no era la razón. Mis padres han visto mi amor para el Señor y para los que no le conocen. Ellos saben que estoy estudiando la Biblia y español en la universidad y querían darme la oportunidad de practicar los dos. 

Tercero, aprendí como confiar en mis padres aquí y también en mi padre que está en el cielo. Mis padres aquí me dijeron, “Willy, sabemos tu amor para el Señor y tu habilidad para enseñar, si se puede. Sabemos que va a ser difícil y vas a estar nervioso, pero no estás solo, tienes el espíritu santo para ayudarte y cambiar los corazones de los estudiantes.” Aunque en el principio, no les creí, ahora, les creo. Mis padres no estaban tratando de darme más tarea, estaban tratando de darme la oportunidad de aplicar todo que he aprendido en mis clases y dar los estudiantes la oportunidad de escuchar a un hombre de un otro país compartir el gozo del seguir a Cristo. 

PLAN

Durante mi tiempo viviendo con esta familia ecuatoriana, he aprendido el gozo de vivir con personas nuevas y diferentes. He aprendido como amar una familia con una cultura muy diferente de que la mía. He aprendido cosas maravillosas que quiero incluir en mi vida y familia para siempre. He aprendido como establecer relaciones que solo están en español. He aprendido a apreciar los alimentos que son nuevos. He aprendido que, aunque hay muchas diferencias culturales alrededor del mundo, las personas son muy similares. Dios creó todos los seres humanos en su imagen. Todos son dignos de amor y respetar. 

En el futuro, trataré a ver cada oportunidad nueva como una oportunidad para alabar a Dios y amar y servir a las demás. Cuando tenga una familia, quiero implementar muchas de las cosas culturales que he aprendido durante mi tiempo aquí con la familia Vargas. He aprendido mi papel de mensajero. Ojalá que pueda, con la fuerza de Dios, entrar cada situación nueva con la confidencia que solo tengo el papel de compartir el mensaje con amor y verdad, y Dios va a hacer el resto. Estoy agradecido que he decidido vivir con una familia ecuatoriana todo el tiempo. Estoy agradecido a Dios por esta familia maravillosa. Estoy agradecido por la salvación, confidencia, y paz que solo tengo en Cristo. Estoy agradecido.